El propósito de un cambio de imagen es subirnos la autoestima y reconocer nuestra belleza. ¿Qué tal si le hiciéramos un cambio de imagen a nuestra comunicación para vivir con más confianza ante la vida?
Por años me he mantenido callada ante conversaciones difíciles. Muchas veces porque la otra parte ante mí lo que desea es ventilar y no le importa mi opinión; otras, porque no sé qué decir que pueda apoyar; y muchas otras por temor. A que me agredieran, física o verbalmente; a que me regañaran; a que me rechazaran. Dar mi opinión no era la manera más efectiva de comunicar.
Pero cuando la voz es silenciada mucho tiempo, llega un momento que explota la garganta y eso me sucedió a mí. En el 2012 me removieron la tiroides, porque tenía cáncer. Probablemente por todas las palabras que callé y dejé almacenadas en mi cuerpo. Eso me llevó a hacer un cambio de imagen en mi comunicación. Ya había comenzado en escuela superior, cuando participé en una competencia de oratoria y quedé en tercer lugar – porque solo había 3 participantes. Ya en universidad continué con clases donde era requerido hablar ante los demás participantes. Ese inicio fue soltando mi timidez y acentuando mi voz, más no completamente. Durante años callé por no ofender y ahí la enfermedad.
Luego de la cirugía y la quimio, reflexioné por largo tiempo y llegué a la conclusión de que no valía el esfuerzo permanecer tan callada. Las personas reaccionan ya sea con tu silencio o con tus palabras. Es imposible controlar esas reacciones. Decidí hacer un cambio de imagen a mi comunicación y me hice una promesa: respondería a lo que me preguntaran con la honestidad más completa de la que fuera capaz al momento. De la que fuera capaz.
Durante este año he tenido muchas oportunidades de conversar y enfrentar. Unas veces oportunamente, otras lo he dejado para después. Cuando más largas le doy a una conversación es más difícil sostener mi calma. Este es mi camino, mi aprendizaje. El cambio de imagen a mi comunicación es más gradual de lo que me gustaría, pero cada vez voy un poco más confiada.
Marinés Rivera 